Durante la ocupación de Bagdad en 2003 por tropas estadounidenses, al subteniente Roy Miller (Matt Damon) y a su equipo les encargan la misión de recorrer el desierto en busca de armas de destrucción masiva supuestamente almacenadas allí. Registran escondite tras escondite, a cual más peligroso, pero en vez de letales agentes químicos, descubren un elaborado plan que cambia el propósito de su misión. Rodeado de agentes con objetivos contradictorios, Miller debe abrirse camino entre una maraña de espías en un país desconocido mientras intenta encontrar respuestas que quizá sirvan para salvar a un gobierno o para extender la guerra en una región muy inestable. No tardará en descubrir que, en un momento difícil y en una región explosiva, el arma más difícil de encontrar es la verdad.
“Green Zone” es una película que es movida por secuencias de acción rodadas con la intención de resultar verosímiles, con personajes realistas y con un guión que contiene un gran elemento político y de crítica a las motivaciones de la guerra de Irak. Si bien es cierto que las implicaciones del gobierno estadounidense nunca son desarrolladas todo lo que se podría y quedan demasiado abarcadas en un único personaje interpretado por Greg Kinnear. Esta película tiene una intención de denuncia y para ello, emplea aspectos formales del cine de entretenimiento, pero no al revés. Pero si en algo peca el buen guión de Brian Helgeland es de obviedad en varios aspectos. Hoy en día es fácil intuir la verdad sobre las armas de destrucción masiva con lo que resulta evidente hacia dónde se dirige la trama, de hecho ésta es en varios puntos demasiado previsible, llegando hasta un final de redención puramente americanizado.
Se podría considerar a “Green Zone” como una película políticamente incorrecta, en contraposición con la vencedora de los Oscar 2010. No digo con esto que “The Hurt Locker” sea peor film. Pero una gran pregunta se esboza en mi mente: ¿Qué hubiese pasado si “The Hurt Locker” tratara el tema de las (desaparecidas) armas de destrucción masiva, y la burocracia falseada siempre por los Estados Unidos mediante sus medios informativos? Pues lo más seguro es que, el oscar a mejor película se lo hubiese llevado «Avatar«.
El estadounidense medio de hoy en día es crítico con las guerras en concreto, no con la trayectoria imperialista de su país. Como cualquier imperio a lo largo de la Historia, este llegará a su fin. Ya se han curtido en todo tipo batallas desde final de la Primera Guerra Mundial, cuando Estados Unidos se convirtió en el primer banquero y productor industrial del mundo. Más tarde vendrían la Segunda Guerra Mundial con el absoluto consentimiento de su población, seguida de la impopular incursión en Vietnam.
La calidad de la cinta a nivel interpretativo, es soberbia; tanto por Matt como por el resto del elenco, bordando con total veracidad sus papeles gracias sobretodo a su gran ritmo y duración adecuada.
Escenarios, decorados y demás stuff utilizado para el rodaje (sobretodo los extras haciendo de población irakí) son alucinantes, en todo momento crees que estas en Irak. El desastre en las calles, el gentío rodeando a los soldados.. se siente el «agobio» que supondría estar en esas circunstancias y sobretodo la tensión a la que se vieron sometidos los militares en sus acciones.
Nunca he sido muy fan de las películas bélicas, pero ésta te absorbe en la historia, sin llegar a reconocer a los EEUU como los buenos, y los irakíes como los malos, ni viceversa.
Es la expresión tal cual de la realidad, de hasta donde estaría dispuesto a llegar un país (los americanos lo que sea por lo que sea) con tal de conseguir sus objetivos, que como siempre, son clasificados y confidenciales.
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