Doubt / La duda

Doubt, John Patrick Shanley 2008

Doubt, John Patrick Shanley 2008

¿De qué trata?: Es 1964, parroquia de San Nicolás en el Bronx. Un vibrante y carismático sacerdote, el padre Flynn (Philip Seymour Hoffman) está tratando de cambiar las estrictas normas del colegio, que durante años han sido fieramente salvaguardadas por la hermana Aloysius Beauvier (Meryl Streep), una directora con mano de hierro que cree firmemente en el poder de la disciplina. Vientos de cambio político están barriendo la comunidad, y de hecho el colegio ha aceptado a su primer alumno negro, Donald Miller. Pero cuando la hermana James (Amy Adams), una pobre inocente, le comenta a la hermana Aloysius sus sospechas de que el padre Flynn presta «demasiada atención» a Donald, la superiora comienza una cruzada personal para sacar a la luz la verdad y expulsar a Flynn del colegio por abusar del alumno. Sin una sola prueba aparte de su convicción moral, la hermana Aloysius comienza una batalla con el padre Flynn, que amenaza con desgarrar la comunidad con consecuencias irrevocables. Basada en una obra ganadora del Premio Pulitzter y de un Premio Toni en su adaptación teatral.

Meryl Streep, haciendo una interpretación muy bien lograda

Meryl Streep, haciendo una interpretación muy bien lograda

Un año después del asesinato de JFK, una escuela católica de los EEUU se debate entre el tradicionalismo docente de su directora, interpretada por la veterana Meryl Streep, y el aperturismo humanista del párroco del colegio, personaje a quien da vida Philip Seymour Hoffman. Entre ambos hallamos ejerciendo de unión a la hermana James, una joven monja, profesora del colegio, cuyas dudas a la hora de tomar partido por uno u otro bando serán plenamente compartidas por el espectador.

Galardonada con los premios Pulitzer y Tony, “La duda” se trata de una pieza teatral adaptada a la gran pantalla por su propio autor, John Patrick Shanley, director también de la intrascendente Joe contra el volcán (1990). Shanley no sólo se muestra mucho más serio y profundo que en su debut cinematográfico, sino que, lejos de conducir su nuevo film por los fáciles derroteros del maniqueísmo más primario y visceral, mantiene hasta los créditos finales nuestra incerteza acerca de los verdaderos sentimientos y motivaciones de los dos “contendientes”. ¿Es la hermana Aloysius Beauvier una malintencionada mujer interesada en desacreditar al padre Brendan, o bien es la única que ve las secretas e indecentes intenciones que éste tiene sobre un alumno?. Quizá deliberadamente, esta duda irresoluta acabará eclipsando el debate educacional planteado minutos antes y confundirá las verdaderas intenciones del film, haciendo así honor al título de la película y alejándose de otras que, como Priest o Las hermanas de la Magdalena, únicamente pretendían afrentar a la Iglesia católica.

Meryl Streep le da clases de actuación a Amy Adams en pleno Doubt

Meryl Streep le da clases de actuación a Amy Adams en pleno Doubt

Como no podía ser de otra manera, La duda se mueve por unos parámetros bastante teatralizados. Sus acciones, que transcurren en interiores y escenarios limitados visualmente, encuentran en la dialéctica y en los envites verbales su principal dinamizador. Indudablemente, la severa interpretación de Streep y la apaciguada melancolía que casi siempre desprende Seymour Hoffman dotarán a estos diálogos de mayor profundidad y carga dramática. Sin embargo, no nos encontramos ante un mero ejercicio de teatro filmado. John Patrick Shanley acompaña diálogos e interpretaciones con un buen surtido de imágenes simbólicas que de forma bella y constante subrayarán muchos de los sentimientos de sus personajes, confirmándole de paso como un director conocedor del medio, y no como un prestigioso literato que se sitúa detrás de una cámara para adaptarse a sí mismo.

Amy Adams luce temerosa y frágil ante los monstruos que la acompañan

Amy Adams luce temerosa y frágil ante los monstruos que la acompañan

Curiosamente junto con «Revolutionary Road«, esta «Doubt» forma una pareja de ejemplos recientes de premiados dramas que siendo apreciables y contando con muy buen material detrás no acaban de despuntar al terreno de lo perdurable. Uno lamenta que la tensión no estalle con más fuerza, la que sea necesaria al menos para que los mensajes subyacentes de la película lleguen con más garra y le tatuen a uno el corazón con fuego ardiente. Porque siendo ambas tan dadas a la lucidez interpretativa (nominados al Oscar andan los cuatro actores principales de «Doubt»), tan fenomenalmente teatrales uno no alcanza a entender porqué no traspasan más las lineas, porqué el espectador no se queda noqueado en los créditos finales. Y las razones a las que uno puede aferrarse tal vez radiquen en demasiado academicismo, falta de riesgo tanto en realización como en construcción del guión. Y la verdad es que todo esto da que pensar en que estas películas que son interesantes, recomendables y dignas son criticadas porque sus posibilidades son enormes en cuanto que films más limitaditos que sorprendentemente llegan a ser reseñables son destacados como si fueran descubrimientos de culto. «Doubt» sea como fuere, mantiene el suspense hasta el final, tiene a un señor actor Seymour Hoffman que está inmenso y un desenlace cuando menos medianamente inquietante y reflexivo. Tal vez el problema lo tenga quien esto escribe por esperar más pero lo cierto es que esta película podría haber golpeado más fuerte. Siempre me quedará la duda.

Viola Davis, se luce en Doubt

Viola Davis, se luce en Doubt

El drama se centra en varios frentes, ahondando en el enfrentamiento entre una visión retrógrada y severa de la religión, de la moral y de la conducta, y una perspectiva abierta, sustentada en la comunicación, el diálogo y el fluir espontáneo y recíproco del afecto. Por otro lado, también presenta el eterno problema de la intolerancia, del racismo, de las desigualdades y del maltrato tanto físico como psicológico.
El problema que no dejo de percibir en el desarrollo de la película es que, exceptuando algunos pasajes de gran carga reflexiva, crítica y afectiva, el resto lo veo bastante plano, algo insulso y los temas que aborda no son tratados con la suficiente profundidad ni la dedicación que requieren. Al finalizar, me quedé con la sensación de “¿y esto es todo?”

Al grano: Producto vendido con mucha calidad que al final de cuentas te deja un sentimiento de que le falta algo.

* * * / 5